TRIUNFO DE LA RAZÓN Y LA JUSTICIA
NAPOLEÓN GÓMEZ
URRUTIA
Artículo publicado el
jueves 10 de mayo de 2012, en La Jornada
En estos días sucedieron avances
espectaculares y profundos en la lucha de Los Mineros de México. El miércoles 2
de mayo de 2012 la Suprema Corte de Justicia de la Nación, SCJN, resolvió en
forma definitiva que la Secretaría del Trabajo entregue el reconocimiento
oficial o toma de nota al Sindicato Minero y a mí como su líder nacional, en
tanto que el 24 de abril el Magistrado del Primer Tribunal Unitario en Materia
Penal había determinado que la última de las 11 acusaciones que falsamente se
me habían fincado, quedó sin efectos por ser violatoria de la Constitución, lo
mismo que las 10 anteriores que ya estaban canceladas, las cuales fueron la
estrategia central de la persecución política y los abusos de poder en mi
contra y de Los Mineros.
La resolución de la SCJN se produjo en
vísperas de la muy exitosa y fecunda XXXVII Convención General Ordinaria del
Sindicato Minero, en la cual fue refrendada la confianza y la lealtad a la
dirigencia de la Organización Sindical que me honro en presidir. Esas
decisiones impregnaron el alto espíritu de los trabajos de la histórica
Convención General, que entre el 3 y el 5 de mayo reunió a más de 100
dirigentes sindicales de México y del mundo, además de mil Delegados de todo el
país, quienes también aplaudieron los avances alcanzados en nuestra lucha.
Con estos hechos quedó muy claro que en
México todavía existen Jueces, Magistrados y Ministros del Poder Judicial que
mantienen la ética profesional y que finalmente no se prestaron a componendas
ni arreglos ilegales impulsados desde el gobierno, ni a las agresiones y
amenazas que algunos empresarios arrogantes e insensibles lanzaron
irresponsablemente.
Las resoluciones anteriores constituyen
avances espectaculares en beneficio no sólo de la Organización Minera, sino
también de todos los demás sindicatos de México. Este conflicto ha sido una
experiencia digna y valiente, respetuosa, en la cual jamás ni yo en lo personal
ni el Sindicato fuimos doblegados, que habrá de marcar el camino para que las
organizaciones independientes y democráticas puedan salir adelante en sus
propios conflictos.
La Suprema Corte de Justicia de la
Nación determinó que ninguna dependencia administrativa del gobierno tiene la
facultad para impedir que se manifieste la voluntad libre de los trabajadores,
tanto para elegir a sus dirigentes como para tomar los acuerdos con respeto a
su autonomía y libertad sindicales. Al resolver el Magistrado del Primer
Tribunal Unitario en Materia Penal, que quedó sin efectos la última acusación
falsa contra mi persona, porque viola la Constitución Política de México, se
abre el camino para mi más pronto regreso a México y para que el conflicto
minero sea finiquitado mediante negociaciones, que aún deben realizarse, para
terminar una de las más perversas persecuciones políticas, sin precedente, que
se hayan dado en México en contra de los trabajadores, por parte de los
gobiernos panistas de Vicente Fox y de Felipe Calderón, con lo que pretendieron
destruir a una de las organizaciones históricas y sólidas más fuertes del
movimiento sindical de México.
Los Mineros recibimos con satisfacción
estas noticias. A lo largo de los 3 días de la 37 Convención Minera prevaleció
la fundada percepción de que nuestro esfuerzo de más de 6 años contra la
injusticia, la agresión y la impunidad está por llegar a un final positivo. Nos
enorgullece declarar que la unidad, la fortaleza y la lealtad manifestadas
estos años por el gremio de los verdaderos trabajadores mineros está muy cerca
de recibir un justo reconocimiento.
Esta es una experiencia que los
sindicatos autónomos y democráticos de México pueden y deben valorar y
aprovechar. Lo deseo sinceramente, al convocarlos a fortalecer la unidad sin
distinción de siglas y a no cejar en la lucha común por el avance y la
consolidación del Nuevo Sindicalismo Global que trabaja por la libertad y la
autonomía de los sindicatos. Las empresas sin conciencia social y los políticos
conservadores del PAN también deben aprender de esta experiencia, avergonzarse
y cancelar sus intentos de cualquier otra agresión contra los trabajadores y
sus organizaciones sindicales democráticas.
Finalmente, se comienza a hacer justicia
en el conflicto minero, eso es indudable. Particularmente después de una
conspiración política diseñada para eliminar a un líder y a toda una
organización, que en sus mentes irresponsables se oponía a sus intereses. Es
claro que nuestros enemigos nos quisieron aislar, pero recurrimos a la
solidaridad nacional y sobre todo a la internacional, ya que esta no tiene
fronteras. Los aislados resultaron ser ellos, pues en el mundo entero y en
México se les ha condenado como los únicos responsables de provocar el
conflicto minero, que ya cumplió más de 6 años.
Estos dos gobiernos del Partido Acción
Nacional en complicidad con los consorcios privados que apostaron a la
destrucción de nuestra Organización, no lo consiguieron ni lo conseguirán
nunca, tal como lo señalamos repetidas veces a lo largo de estos años. El de ellos
ha sido un empeño infructuoso, huérfano de credibilidad y de eficacia. Nuestra
fuerza los ha exhibido en todo el mundo en su verdadera dimensión, como
“cuerpos sin alma” o “zombies”, como los hemos calificado Los Mineros, y son
esos mismos voraces empresarios ambiciosos de utilidades sólo mediante la
explotación del trabajo obrero y de los recursos naturales no renovables,
quienes deben aprender de esta lección que les proporciona la vida.
No estamos en plan de revancha, sino de
reconstrucción, y por eso no dejaremos de luchar por la justicia, el respeto y
la dignidad, ni permitir que los atentados y las agresiones contra Los Mineros
queden en la impunidad, pues eso sería la peor enseñanza que les podríamos
legar a nuestros hijos y a los propios mexicanos de hoy. Queremos un México de
Justicia, no de arreglos ilegales e inconstitucionales bajo la mesa, que
violenten el estado de derecho y los Derechos Humanos de los trabajadores y de
todos los mexicanos. Queremos que se castigue a los responsables para que estas
agresiones jamás vuelvan a ocurrir en México ni en ningún lugar del mundo.
Vivimos en un parteaguas de las
relaciones laborales de México. Nos hemos acercado a la impartición de la
verdadera justicia en las relaciones de trabajo. La nación debe aprovechar este
gran momento y preparar el cambio de fondo en este mismo sentido, siempre hacia
adelante, como dijo el inolvidable y visionario político canadiense Jack
Layton.