SINDICATO NACIONAL DE TRABAJADORES MINEROS, METALÚRGICOS, SIDERÚRGICOS Y SIMILARES DE LA REPÚBLICA MEXICANA
--BOLETÍN INFORMATIVO—
103/2010
Jueves 16 de diciembre de 2010
*Grupo México de Larrea obliga a sus propios “esquiroles” a firmar que la empresa no tiene ninguna culpa en cualquier accidente o daño que sufran en el interior de sus centros de trabajo.
*Una credencial desnuda la falta total de humanidad de la empresa hacia los que contrata para trabajar en Cananea, Sonora.
*Se justifica plenamente la larga huelga de los compañeros de la Sección 65 exigiendo adecuadas condiciones de seguridad industrial e higiene en el trabajo.
Una muestra contundente del egoísmo absoluto y la ilegalidad con que Grupo México se exculpa a sí mismo de toda responsabilidad en accidentes que ocurran en sus minas y centros de trabajo, la proporciona la credencial que anexamos a este Boletín Informativo.
Se nos hizo llegar esta credencial por manos desconocidas, y pertenece a un “esquirol” o trabajador tercerista, de nombre Luis Carlos Solís Valencia, contratado por Minera de Cananea, SA de CV, filial de Grupo México en Cananea, Sonora.
En dicha credencial, queda muy claro el criterio mezquino y criminal con que esta empresa trata a los empleados y trabajadores a los que ella misma contrata ilegalmente, ya que obligar a una firma de esta naturaleza viola la Ley Federal del Trabajo, la cual establece que toda empresa es responsable de atender a la seguridad de su personal y a las buenas condiciones de trabajo, y a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social le compete obligatoriamente hacer las inspecciones necesarias a fin de que se cumpla con este precepto, lo cual no realiza esta dependencia y solapa ilegalmente a esta empresa.
Lo señalado en esa credencial desprecia que el estado de huelga no ha terminado en ese centro de trabajo, por lo cual el contratar nuevos trabajadores también viola la misma ley.
En la parte frontal de la credencial, después del nombre de la empresa (Minera de Cananea, Grupo México), del logotipo de la misma, y del nombre del trabajador, Luis Carlos Solís Valencia, se dice que “le otorga autorización” a éste “para entrar a sus instalaciones en virtud de que presta sus servicios al contratista: Martín Bustamante”. La firman “Relaciones Industriales” y el propio “esquirol”.
Pero en el reverso de la credencial, señala textualmente: “El Sr. Solís Valencia Luis Carlos manifiesta su conformidad en que Mexicana de Cananea, SA de CV no se hará responsable de los accidentes o daños que ocurran a su persona o a sus propiedades dentro del perímetro de sus instalaciones”.
Así es como se las gasta la empresa Grupo México con los trabajadores que ella misma contrata. Los hace firmar una efectiva orden de suicidio en caso de accidente.
Esta es una pequeña pero suficiente muestra de la criminal conducta de Grupo México, que justifica a plenitud la razón que les asiste a los compañeros trabajadores de la Sección 65 del Sindicato Nacional de Mineros de Cananea, Sonora, en su huelga legal y legítima de casi 3 años y medio de duración, en la cual exigen adecuadas condiciones de seguridad industrial, higiene en el trabajo y salud, que Grupo México arrogantemente ha ignorado con la complicidad absoluta de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social que encabeza el siniestro enemigo de los trabajadores, Javier Lozano Alarcón.
Asimismo, es una confesión involuntaria, pero válida, de Grupo México de que en la mina de Cananea prevalecen pésimas condiciones de seguridad industrial e higiene en el trabajo, pese a las parrafadas de propaganda mediática que ha invertido la empresa de Larrea en mentir sobre las condiciones de seguridad en esa y en otras minas de la misma empresa.
Con este hecho, queda clara la violación a los derechos laborales y humanos de parte de Grupo México, empresa a la que han estado defendiendo abogados faltos de moral y ética, encabezados por Salvador Rocha Díaz y Agustín Acosta Azcón, así como jueces venales y charros pagados por esta empresa, y algunos columnistas y medios también pagados por Grupo México, que se han dedicado a proteger a la empresa, en el intento del sicópata Germán Feliciano Larrea Mota Velasco de establecer un sistema de esclavitud que ofende gravemente toda conciencia de lo que deben ser las relaciones laborales en nuestro país y que están marcados en la Constitución y en las diversas leyes.
