SINDICATO NACIONAL DE TRABAJADORES MINEROS, METALÚRGICOS, SIDERÚRGICOS Y SIMILARES DE LA REPÚBLICA MEXICANA
--BOLETÍN INFORMATIVO—
49/2009
Lunes 1º de junio de 2009
*A más de un siglo de la Huelga de Cananea sigue la lucha por nuestros derechos obreros.
*La gesta de los trabajadores de entonces no será olvidada con sus acciones por los de hoy.
*La empresa del coronel Green y la de Germán Larrea, tan rapaces y abusivas una como la otra.
Los trabajadores mineros y metalúrgicos de Cananea, y representaciones de todo el Sindicato Nacional de Mineros, se reunieron hoy 1º de junio en la ciudad sonorense, en un emocionado recuerdo de la gesta trágica pero también gloriosa y heroica, del movimiento de Cananea de 1906 en que, masacrados despiadadamente por fuerzas armadas nacionales y “rangers” norteamericanos, más de cinco mil trabajadores de aquel entonces se lanzaron a una huelga que entonces no amparaba ley alguna, sino que el deseo de justicia y la desesperación la hicieron estallar.
Hoy hace 103 años fueron asesinados, tras una muy cruenta represión, 23 mineros, 22 más fueron heridos y otros 50 fueron detenidos, a la vez que centenares de obreros tuvieron que huir ante la violencia desatada por las fuerzas militares del Porfiriato y de Arizona, EU. Aquella huelga fue reprimida a sangre y fuego. Pero en medio de la tragedia, lo más sobresaliente fue el espíritu indómito de que hicieron gala los trabajadores en busca de elementales mejorías laborales, ya que sus demandas principales fueron acortar la jornada diaria de trabajo a 8 horas y exigir un sueldo mínimo de 5 pesos, así como que cesara la discriminación de los mexicanos a favor de los extranjeros que contrataba la empresa norteamericana Cananea Consolidated Copper Company, propiedad del coronel y aventurero norteamericano William C. Greene, favoreciéndolos con situaciones muy por arriba de las bajísimas retribuciones e inhumanas condiciones de trabajo que daba como limosna a los trabajadores mexicanos.
Fue la gesta de Cananea un elemento precursor fundamental de la Revolución Social de 1917, pues por ella fue posible, posteriormente al movimiento armado, establecer la jornada laboral de 8 horas diarias y crear el concepto de salario mínimo en las leyes de México. A esa huelga se sumaron muchos otros movimientos de protesta e inconformidad sociales, también reprimidos con sadismo por la dictadura de Porfirio Díaz, que para entonces ya detentaba el poder por más de 30 años, y hacía valer su célebre frase de “mátalos en caliente”.
Los trabajadores actuales de Cananea rindieron su homenaje, en una intensa jornada de recordación y veneración, a los trabajadores huelguistas de entonces, que se inició con una entrevista de radio a las 8:00 horas por la estación local más importante, del compañero Napoleón Gómez Urrutia, Secretario General del Sindicato Nacional de Mineros, en la cual expresó la similitud de las luchas de los mineros de Cananea en 1906 y en 2009, y nuestra obligación actual de asumir con valentía los retos de la presente lucha.
Entre los diversos oradores en el acto, efectuado en las instalaciones en huelga de ese centro de trabajo, hizo uso de la palabra, en representación del propio Napoleón Gómez Urrutia y del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato, el compañero Javier Zúñiga García, Secretario de Trabajo de la Organización, quien señaló cómo los trabajadores huelguistas de la Cananea de entonces sembraron la semilla de una Revolución e hicieron posible una nueva Constitución, abriendo el camino para crear una nueva Nación.
La Revolución, la Constitución y la Nación, agregó, ahora se están viendo traicionadas y pisoteadas desde el gobierno de derecha, servil a los empresarios voraces, contra cuyos abusos e ilegalidades de tipo fascista lucha enérgicamente, ya hace más de tres años, el Sindicato Minero y sus trabajadores mineros, metalúrgicos y siderúrgicos, con el liderazgo del compañero Napoleón Gómez Urrutia, y se mantiene a pie firme en los dos años de huelga tanto en Cananea, Sonora, como en Sombrerete, Zacatecas, y en Taxco, Guerrero. Esta de hoy, dijeron los oradores, es una nueva gesta de la resistencia obrera de los mineros, de dureza similar a la de nuestros iguales de hace 103 años.
Los paralelismos entre las situaciones de 1906 y 2009 estuvieron presentes en la ceremonia de los trabajadores, a la cual asistieron representaciones de la inmensa mayoría de las Secciones Sindicales del país, así como de la sociedad civil y de otras agrupaciones de trabajadores.
Sergio Tolano Lizárraga, Secretario General de la Sección 65 del Sindicato Nacional de Mineros, de Cananea, hizo ver cómo la empresa del coronel Green afirmaba hipócritamente que los sueldos de los trabajadores de Cananea eran muy altos y él siempre se había negado a reducirlos, porque, según decía, “ustedes saben muy bien que siempre he tenido mucho orgullo y satisfacción personal por el bienestar y prosperidad de Cananea”, lo cual no le impidió masacrar a los obreros. Señaló Tolano Lizárraga cómo hoy la empresa Grupo México de Germán Larrea Mota Velasco, alega que paga salarios muy altos a los mineros de Cananea y se manifiesta también hipócritamente por el bienestar de Cananea y sus trabajadores, lo cual no le ha impedido amenazar a los trabajadores en huelga con la violencia armada. Por lo cual es pura hipocresía su afán por el bienestar de Cananea, indicó, sólo es una falsedad pues, sobre todo, se niega a atender la justa demanda obrera de que se establezcan condiciones reales de protección industrial y de la salud de los trabajadores, que es el reclamo básico de los mineros en huelga.
Javier Zúñiga García, a su vez, convocó a no creernos que la situación de hace 103 años ya fue superada. Si bien ya no es extranjera la empresa que explota los yacimientos de cobre de Cananea, sino una empresa concesionada privada del país, su explotación del trabajo humano es también voraz y abusiva. El dueño de hoy, señaló Zúñiga García, ya no es extranjero, pero es igual de abusivo, perverso, aventurero y rapaz, o más, que el de hace un siglo. “Si no fuera así, precisó el Secretario de Trabajo del Sindicato, ya se hubieran resuelto con justicia para nosotros los trabajadores, nuestras huelgas que ya cumplieron 22 meses de duración, igual en Cananea que en Sombrerete y en Taxco, que han sumido en la penuria económica a los mineros y a sus familias y han postrado la economía de estas tres ciudades, por la ceguera y la perversidad de Grupo México”.
Hubo acuerdo unánime de los asistentes cuando se dijo que nuestra actual huelga no será derrotada, porque nosotros los trabajadores y el Sindicato Nacional de Mineros, encabezado por el compañero Napoleón Gómez Urrutia, tenemos memoria y aprendimos aquella experiencia de hace 103 años, y porque hemos madurado y nos acogemos a una Ley Laboral que entonces ni siquiera existía. Y a pesar de todas las trampas legales que los abogados patronales y el gobierno federal aplican hoy, esa Ley y jueces honestos impiden que Germán Larrea, que se siente “el nuevo coronel Green”, entre a saco contra nosotros y contra nuestros derechos. “No permitiremos que se nos aplaste, pero si llegara a ser necesario enfrentarnos a cualquier violencia con la valentía y el honor de trabajadores dignos, responderemos con la misma conducta que demostraron tener los compañeros que hace 103 años se lanzaron a la huelga sin escatimar enjundia ni dignidad”.
“No estamos hoy con las manos vacías, como desgraciadamente sí lo estuvieron nuestros compañeros de clase de hace un siglo, a quienes asistían la justicia y la razón y su valentía armada sólo de piedras y palos. Hoy nos asisten la justicia y la razón, pero también la ley, y un gran apoyo nacional e internacional de agrupaciones sindicales, que en el mundo suman a más 400 millones de trabajadores. Sabemos que estamos al lado de la historia, como los de 1906, y venceremos en esta lucha”, concluyó.
--BOLETÍN INFORMATIVO—
49/2009
Lunes 1º de junio de 2009
*A más de un siglo de la Huelga de Cananea sigue la lucha por nuestros derechos obreros.
*La gesta de los trabajadores de entonces no será olvidada con sus acciones por los de hoy.
*La empresa del coronel Green y la de Germán Larrea, tan rapaces y abusivas una como la otra.
Los trabajadores mineros y metalúrgicos de Cananea, y representaciones de todo el Sindicato Nacional de Mineros, se reunieron hoy 1º de junio en la ciudad sonorense, en un emocionado recuerdo de la gesta trágica pero también gloriosa y heroica, del movimiento de Cananea de 1906 en que, masacrados despiadadamente por fuerzas armadas nacionales y “rangers” norteamericanos, más de cinco mil trabajadores de aquel entonces se lanzaron a una huelga que entonces no amparaba ley alguna, sino que el deseo de justicia y la desesperación la hicieron estallar.
Hoy hace 103 años fueron asesinados, tras una muy cruenta represión, 23 mineros, 22 más fueron heridos y otros 50 fueron detenidos, a la vez que centenares de obreros tuvieron que huir ante la violencia desatada por las fuerzas militares del Porfiriato y de Arizona, EU. Aquella huelga fue reprimida a sangre y fuego. Pero en medio de la tragedia, lo más sobresaliente fue el espíritu indómito de que hicieron gala los trabajadores en busca de elementales mejorías laborales, ya que sus demandas principales fueron acortar la jornada diaria de trabajo a 8 horas y exigir un sueldo mínimo de 5 pesos, así como que cesara la discriminación de los mexicanos a favor de los extranjeros que contrataba la empresa norteamericana Cananea Consolidated Copper Company, propiedad del coronel y aventurero norteamericano William C. Greene, favoreciéndolos con situaciones muy por arriba de las bajísimas retribuciones e inhumanas condiciones de trabajo que daba como limosna a los trabajadores mexicanos.
Fue la gesta de Cananea un elemento precursor fundamental de la Revolución Social de 1917, pues por ella fue posible, posteriormente al movimiento armado, establecer la jornada laboral de 8 horas diarias y crear el concepto de salario mínimo en las leyes de México. A esa huelga se sumaron muchos otros movimientos de protesta e inconformidad sociales, también reprimidos con sadismo por la dictadura de Porfirio Díaz, que para entonces ya detentaba el poder por más de 30 años, y hacía valer su célebre frase de “mátalos en caliente”.
Los trabajadores actuales de Cananea rindieron su homenaje, en una intensa jornada de recordación y veneración, a los trabajadores huelguistas de entonces, que se inició con una entrevista de radio a las 8:00 horas por la estación local más importante, del compañero Napoleón Gómez Urrutia, Secretario General del Sindicato Nacional de Mineros, en la cual expresó la similitud de las luchas de los mineros de Cananea en 1906 y en 2009, y nuestra obligación actual de asumir con valentía los retos de la presente lucha.
Entre los diversos oradores en el acto, efectuado en las instalaciones en huelga de ese centro de trabajo, hizo uso de la palabra, en representación del propio Napoleón Gómez Urrutia y del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato, el compañero Javier Zúñiga García, Secretario de Trabajo de la Organización, quien señaló cómo los trabajadores huelguistas de la Cananea de entonces sembraron la semilla de una Revolución e hicieron posible una nueva Constitución, abriendo el camino para crear una nueva Nación.
La Revolución, la Constitución y la Nación, agregó, ahora se están viendo traicionadas y pisoteadas desde el gobierno de derecha, servil a los empresarios voraces, contra cuyos abusos e ilegalidades de tipo fascista lucha enérgicamente, ya hace más de tres años, el Sindicato Minero y sus trabajadores mineros, metalúrgicos y siderúrgicos, con el liderazgo del compañero Napoleón Gómez Urrutia, y se mantiene a pie firme en los dos años de huelga tanto en Cananea, Sonora, como en Sombrerete, Zacatecas, y en Taxco, Guerrero. Esta de hoy, dijeron los oradores, es una nueva gesta de la resistencia obrera de los mineros, de dureza similar a la de nuestros iguales de hace 103 años.
Los paralelismos entre las situaciones de 1906 y 2009 estuvieron presentes en la ceremonia de los trabajadores, a la cual asistieron representaciones de la inmensa mayoría de las Secciones Sindicales del país, así como de la sociedad civil y de otras agrupaciones de trabajadores.
Sergio Tolano Lizárraga, Secretario General de la Sección 65 del Sindicato Nacional de Mineros, de Cananea, hizo ver cómo la empresa del coronel Green afirmaba hipócritamente que los sueldos de los trabajadores de Cananea eran muy altos y él siempre se había negado a reducirlos, porque, según decía, “ustedes saben muy bien que siempre he tenido mucho orgullo y satisfacción personal por el bienestar y prosperidad de Cananea”, lo cual no le impidió masacrar a los obreros. Señaló Tolano Lizárraga cómo hoy la empresa Grupo México de Germán Larrea Mota Velasco, alega que paga salarios muy altos a los mineros de Cananea y se manifiesta también hipócritamente por el bienestar de Cananea y sus trabajadores, lo cual no le ha impedido amenazar a los trabajadores en huelga con la violencia armada. Por lo cual es pura hipocresía su afán por el bienestar de Cananea, indicó, sólo es una falsedad pues, sobre todo, se niega a atender la justa demanda obrera de que se establezcan condiciones reales de protección industrial y de la salud de los trabajadores, que es el reclamo básico de los mineros en huelga.
Javier Zúñiga García, a su vez, convocó a no creernos que la situación de hace 103 años ya fue superada. Si bien ya no es extranjera la empresa que explota los yacimientos de cobre de Cananea, sino una empresa concesionada privada del país, su explotación del trabajo humano es también voraz y abusiva. El dueño de hoy, señaló Zúñiga García, ya no es extranjero, pero es igual de abusivo, perverso, aventurero y rapaz, o más, que el de hace un siglo. “Si no fuera así, precisó el Secretario de Trabajo del Sindicato, ya se hubieran resuelto con justicia para nosotros los trabajadores, nuestras huelgas que ya cumplieron 22 meses de duración, igual en Cananea que en Sombrerete y en Taxco, que han sumido en la penuria económica a los mineros y a sus familias y han postrado la economía de estas tres ciudades, por la ceguera y la perversidad de Grupo México”.
Hubo acuerdo unánime de los asistentes cuando se dijo que nuestra actual huelga no será derrotada, porque nosotros los trabajadores y el Sindicato Nacional de Mineros, encabezado por el compañero Napoleón Gómez Urrutia, tenemos memoria y aprendimos aquella experiencia de hace 103 años, y porque hemos madurado y nos acogemos a una Ley Laboral que entonces ni siquiera existía. Y a pesar de todas las trampas legales que los abogados patronales y el gobierno federal aplican hoy, esa Ley y jueces honestos impiden que Germán Larrea, que se siente “el nuevo coronel Green”, entre a saco contra nosotros y contra nuestros derechos. “No permitiremos que se nos aplaste, pero si llegara a ser necesario enfrentarnos a cualquier violencia con la valentía y el honor de trabajadores dignos, responderemos con la misma conducta que demostraron tener los compañeros que hace 103 años se lanzaron a la huelga sin escatimar enjundia ni dignidad”.
“No estamos hoy con las manos vacías, como desgraciadamente sí lo estuvieron nuestros compañeros de clase de hace un siglo, a quienes asistían la justicia y la razón y su valentía armada sólo de piedras y palos. Hoy nos asisten la justicia y la razón, pero también la ley, y un gran apoyo nacional e internacional de agrupaciones sindicales, que en el mundo suman a más 400 millones de trabajadores. Sabemos que estamos al lado de la historia, como los de 1906, y venceremos en esta lucha”, concluyó.